Ya tiene días que un gato me acecha. Está siempre al pie de la ventana de mi recámara y cada que la abro se quiere meter. Se me hace que ando en celo.
¿Dónde andará la gorda?
Ah! Ahi está mírala toda sexy acabada de despertar, con los pelos parados y hasta un poco de babita...
A ver mamita, no te muevas, me voy a acercar lentamente...
Shhhh shhhhhhhh no te voy a hacer daño...
Je je je nomás no te muevas...
Mierda! Pinche vidrio!!
8 comentarios:
Jaaaaaaaaaa, me encanto!!!
Un gato que ayuda a subir la autoestima. Deme dos para llevar...
ese gato està precioso!!!! ya me lo imagino estrellandose contra la ventana, pobrecito!
yo ya sabes que quiero un gato...cuando me regalen uno causarà una crisis matrimonial---gulp---
Me encantó la secuencia de fotos y tu historia ¿real? jaja.
A mí me pasa lo mismo con los perros, a donde quiera que llego parece que traigo imán con los desgraciados, luego hasta me siguen, y con lo gordos que me caen. En fin es mi karma, ¿quién sabe por qué?
ábrale al gato!!
se ve buena gente : )
Chila: No es broma, el gato quiere conmigo! jaja
Irene: Cómprate mas plantas mi amor!
Carmen: La historia es real, los ojos de los gatos no mienten. (ni las voces dentro de mi cabeza)
Dna: Un día le abrí la ventana y me brincó y me asustó! Otro día le eché una pierna de pollo y no se la comió!
Gracias por las visitas! Muy apreciadas :-D
muy buena la foto del header :x
hola,
ya había leído tu blog pero no me animaba a comentar , jejeje
la historia está increíble, el gato se ve lindísimo :) no me quiero imaginar lo que le pasó...jeje
y la foto del header está buenísima, me encantó :D
saludos
Maga: Saludos y gracias por venir y comentar.
Soy muy floja y casi no escribo pero espero enmendarme.
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